Créeme. Se puede aprender sobre innovación y modelo de negocios de cualquier tipo de empresa, sin importar su tamaño o localización.
Hace unos meses que quería hablarte de este ejemplo real de una pequeña tienda de barrio que abrió hace poco más o menos un año, y que está teniendo un éxito arrollador en su municipio. Y lo mejor es que su dueño es jovencísimo, lo cual es muy esperanzador.
Una historia de innovación y modelo de negocios
Te pongo en situación.
La historia de innovación y modelo de negocios que te voy a contar es de un comercio minorista, concretamente de una tienda de alimentación de barrio, de no más de 100 m2 de superficie.
Este comercio se encuentra en una localidad que cuenta con unos 20.000 habitantes, con un poder adquisitivo medio-bajo, cuyas actividades económicas son mayoritariamente el comercio y la agricultura. Existen algunos establecimientos, como Mercadona, Aldi, etc.
La capital se encuentra a más de 30 km. de distancia, con lo que sus habitantes, especialmente la población más longeva, están acostumbrados al comercio de cercanía y de rato familiar. Todo el mundo se conoce y el entorno es muy tradicional.
En este entorno, nuestro emprendedor, llamémosle Juan, decide montar un supermercado de barrio para dar servicio a sus clientes potenciales, en un barrio en el que ya existe un negocio similar que lleva funcionando más de 10 años. Juan viene de un negocio familiar, que no puede dejar de atender porque su padre se jubila pronto, especializado en carnes y embutidos.
¿Qué hizo Juan?
Como ya te he contado, Juan tuvo la idea de, aprovechando su experiencia en el negocio familiar y para darle también salida al producto en otra localización, montar un supermercado.
Observó que ya había uno, pero detectó un nicho de mercado, una brecha por la que colarse. Para que innovación y modelo de negocios no es sólo aplicable a la gran empresa, ni tampoco se trata de inventar grandes artificios.
Lo que vio Juan es que las tiendas cercanas cerraban a mediodía, cuando mucha gente viene de la capital a comer a casa. Lo mismo sucedía por la tarde, que cerraban a las 21:00 como muy tarde. También se dio cuenta que las tiendas regentadas por asiáticos no cerraban, sus horarios eran más amplios, pero la clientela no se fiaba mucho de ellos. Por todo esto decidió abrir su tienda de 8 de la mañana a 12 de la noche, incluído fines de semana y festivos.
A día de hoy, Juan tiene 4 personas empleadas en 3 turnos, sigue atendiendo al negocio familiar y ni siquiera terminó sus estudios de bachillerato.
Parece que estudiar mata la creatividad, e influye en la innovación y modelo de negocios.
Cómo puedes implementarlo en tu negocio
A veces los que nos dedicamos a los servicios profesionales nos bloqueamos porque queremos ser tan innovadores o desarrollar servicios tan perfectos que no avanzamos.
Por eso admiro la simplicidad de Juan a la hora de plantearse crear su nuevo negocio en un mercado pequeño, saturado, y que tiende a ir a precio… ¿Te suena?
Así que he hecho un análisis para poder replicar este caso de éxito en varios pasos.
1. Habla con tus clientes y sé observador
Juan aprovechó el negocio familiar para recoger información, como que otras tiendas abrían durante más tiempo y que los clientes no se fiaban mucho.
Si vas a montarte por tu cuenta o a desarrollar un nuevo servicio, habla con tus clientes y observa tu mercado. Lee revistas de tu sector, busca casos de éxito, habla con clientes de la competencia, etc.
2. Vigila a tu competencia y busca la brecha
A pesar de que en su municipio ya había negocios similares para su mercado, Juan buscó un hueco en el que colarse. Aprovechó un mercado desatendido para posicionarse.
Ya te lo adelantaba en el punto anterior. Busca la debilidad de tus competidores y conviértela en tu fortaleza.
Para ello, aparte de permanecer a la escucha, te recomiendo realizar un análisis DAFO.
3. Diseña tu producto o servicio en base a la innovación y modelo de negocios
Juan quería darle salida a los productos del negocio familiar, que si recuerdas estaba especializado en carnes y embutidos. Partiendo de esa base, de escuchar a sus clientes y de observar a su competencia, montó su nuevo comercio. Fue coherente en todo momento con el proceso.
Haz tú lo mismo.
4. Publicítate en los medios adecuados
En el municipio donde Juan reside es muy habitual que salga un coche con un altavoz anunciando los acontecimientos más relevantes para su comunidad. También funciona muy bien el boca a boca. Por este motivo Juan contrató el servicio de anuncios del coche, e invitó a los clientes del negocio familiar a la inauguración. También hace publicidad en el negocio de su padre.
Si tus clientes están en redes sociales, asisten a ferias o eventos, pertenecen a una asociación o colegio profesional, busca la manera de acercarte a ellos para publicitar tus servicios.
5. Adáptate
En un principio, Juan quería abrir el comercio las 24 horas, pero pronto se dio cuenta que era sobredimensionar el negocio. No iba a obtener un retorno adecuado a los recursos que tenía que desplegar. Así que lo que hizo fue plantear un horario, que fue adaptando los primeros meses en base a la demanda, y así también dotó al negocio de personal y turnos adecuados.
Con los servicios sucede lo mismo. Arranca con algo mínimo y luego ve adaptándote a lo que te piden. O lo que es lo mismo: desarrolla el producto mínimo viable.
6. Empieza con un «producto gancho»
En el pueblo de Juan nadie hacia pan reciente los fines de semana, ni por las tardes tampoco, así que invirtió en un horno para hacer pan de este que viene congelado.
Las personas que regresan del trabajo a la hora que otros comercios están cerrados (mediodía y tarde-noche) suelen pasar a recoger pan recién hecho para comer o cenar. Y por un precio muy competitivo. Esto atrae un gran flujo de clientes a su establecimiento, que en muchas ocasiones acaban comprando algo más.
También es habitual en las tardes de fútbol ver a gente haciendo cola para comprar pan, fiambre, palomitas y snacks, refrescos, etc… Por cierto, atienden muy rápidamente, con lo que nadie se pierde ni un minuto del encuentro…
Diseña un servicio que haga de gancho, de forma que te permita acercarte a tu cliente, demostrar lo bueno que eres y ganarte su confianza, y venderle algo más.
Y la mejor forma de empezar esta cadena, es ofrecer un recurso gratuito que ayude a tu cliente a resolver un problema muy concreto. Es lo que se llama lead magnet y te recomiendo diseñarlo YA.
Y estas son las lecciones sobre innovación y modelo de negocios que puedes aprender de un emprendedor y su comercio local.
Te toca. ¿Vas a aplicar a tu proyecto online las «tácticas» de Juan? ¡Vamos a los comentarios!